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Vivimos en un mar agitado de retroalimentación. Listas de comentarios aparecen en las páginas web como graffitis. Arremolinan a nuestro alrededor sus emoticones con signos de pulgares arriba, las manos aplaudiendo, signos OK, caras felices, caras tristes y la lista continúa. Muchos sitios web te piden que tomes una breve encuesta con un cuadro emergente que oscurece la mayor parte de lo que estás tratando de leer. Es abrumador. Está en todas partes, y es sofocante. Como resultado de estas encuestas a los clientes y los cuadros de comentarios siempre presentes, estamos condicionados a creer que todo el mundo quiere nuestra reacción. Y debido a que muchos lugares siguen preguntando por nuestra opinión, creemos que estamos capacitados para dar una opinión sobre cada tema. Sin embargo, el resultado son bases de datos llenas de comentarios y opiniones, la mayoría de los cuales son inútiles. No obstante, la retroalimentación está aquí para quedarse y hemos ido tan lejos como para darle nombre oficial : Big data. Es cierto que los datos pueden conducir a una mejor información y mejores decisiones. El problema es que más no es siempre mejor. A veces, menos es más. Los datos correctos son de gran ayuda en el descubrimiento de información valiosa. Así que, en lugar de añadir un montón de datos, ¿cómo nos aseguramos de que las interacciones que ofrecemos son realmente útiles? En el contexto de negocios, nuestra investigación sugiere que los siguientes cuatro pasos ayudarán a hacer el proceso de retroalimentación más eficaz para tu marca. Descubre el porqué de los comentarios y encuestas. En el caso de las encuestas pregúntate cómo se van a utilizar. Qué datos son cruciales para el crecimiento de tu marca y cuáles te gustaría saber sólo por curiosidad. Los comentarios son otra materia: no puedes controlar lo que la gente va a decir, aunque puedes tratar de nuclear la información con un caption que invite a opinar sobre determinado punto. Tampoco es necesario que los leas todos, sólo los más populares o de usuarios frecuentes. Piensa en un entorno de participación La retroalimentación es más útil cuando se proporciona en un contexto de expectativas bien definidas. Un esfuerzo por moderar una interacción a través de normas, ayudará a que su retroalimentación sea objetiva Así mismo asegura que las acciones tomadas tengan más éxito. Mantente enfocado. Mantén tus comentarios el centro de atención, en los casos en que se ha cumplido con el estándar. Si no tratar de redirigir el proceso cuando exista una pequeña brecha entre este y la realidad. Hacer esto nos permitirá tomar mejores decisiones y hacer la participación más democrática, permitiendo a la gente que corrija sus participaciones y creando un patrón en torno a ellas. Cuando alguien pide retroalimentación es que está tratando de hacer las cosas bien, así que no renuncies a ella, seguro ayudará a tu marca a crecer y fortalecerse.