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Debido a que las necesidades de los consumidores son infinitas, en Chile existe un amplio mercado dispuesto a satisfacer todas esas, independiente de cuáles y cómo sean. Cuando se tiene en mente una idea, es necesario reflexionar, investigar y seguir algunos puntos básicos para poder en marcha una idea de "negocio" que sea rentable, que se proyecte y perdure en el tiempo. Para que esto suceda es fundamental crear una identidad de marca que refleje la personalidad de la empresa y se preocupe de cómo la marca es vista, cómo se relaciona con las personas, entorno y grupo de interés. Para esto es necesario tener claro el producto o servicio que se quiere ofrecer y considerar si es realmente necesario para el mercado actual. La idea es que el negocio que se esté armando, responda a una necesidad que no se haya solucionado dentro de este mercado o busque solucionarlo de una mejor manera y de modo eficiente. El primer paso es "Registrar" la marca para protegerla de un uso indebido o plagio, y en Chile el organismo encargado de esta función es INAPI y una de sus principales funciones es el registro de los derechos de Propiedad Industrial. Para registrar una marca, es necesario presentar una solicitud ante el organismo mencionado, se recomienda gestionar el registro a través de un abogado experto que pueda brindar una mejor asesoría y llevar el caso de mejor forma. Para ello el primer paso del futuro emprendedor es solicitar un análisis de factibilidad previa de su expresión, con el fin de detectar similitudes con otras marcas ya registradas o bien causales de irregistrabilidad, como por ejemplo que se trate de una expresión de uso común, indicativa o descriptiva. Ya que si ello no se detecta previamente, iniciaré una solicitud sin ningún tipo de oportunidad y se perderá tiempo y dinero. Es importante el registro de la marca para protegerla de algún uso malicioso por parte de un tercero, obstaculizar a la competencia de usar signos distintivos similares y principalmente distinguir sus productos o servicios en el mercado, evitando así que su clientela se desvíe. Luego de tener mi informe de factibilidad e ingresar la solicitud a INAPI, debo realizar un estudio de mercado en donde se investigue al grupo objetivo de personas que va dirigido el producto o servicio ofrecido, con la finalidad de conocerlo a la perfección (perfil, edad, nivel de estudios, intereses, área geográfica, comportamientos de compra, preferencias, entre otros). También es necesario tener clara la competencia para saber qué hacen, de qué forma y dónde lo hacen. Además es imprescindible para toda empresa tener claro sus propias debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas frente al mercado creando una estrategia para definir si van a competir por diferenciación (valor agregado, lo que diferencia a la empresa del resto) o liderazgo por costo (competencia por costos). Debemos tener claro la promoción y publicidad. Cómo se van a dar a conocer, cómo van a captar la atención del consumidor y a través qué de medios y soportes se va a llegar a ellos. Teniendo claro todos esos puntos, se debe tener especial cuidado en el manejo de la planificación, controlar los tiempos y los gastos. Tener definido el capital a invertir para que no haya un manejo inadecuado que pueda afectar la solvencia económica o liquidez de la empresa y en consecuencia llevarla a la quiebra antes de tiempo.